hace mucho tiempo escuché a un profesor decir que el tiempo es vida y que cuando decimos "no tengo tiempo" en realidad estamos diciendo "no tengo vida".
Las personas pensamos que nuestro tiempo es infinito, que vamos a vivir para siempre, que ya habrá tiempo. Sin embargo, somos seres finitos, con un comienzo y un final y conocer cómo utilizamos nuestro tiempo, nos puede ayudar a gestionarlo mejor.
Cómo estructuramos el tiempo
Según Eric Berne, aburrirse durante largos períodos de tiempo, apresura el deterioro emocional y físico de la misma manera que lo hacen la falta de afecto y la falta de contacto con otras personas.
Según este autor, las personas estructuramos el tiempo de seis maneras diferentes. A veces nos aislamos de los demás, otras veces nos ocupamos con rituales o pasatiempos, en otras ocasiones practicamos juegos psicológicos, también realizamos actividades y de vez en cuando compartimos momentos de intimidad.
aislamiento
Las personas podemos aislarnos de dos maneras diferentes, cuando nos retiramos físicamente de un lugar y nos disponemos a estar solos, o psicológicamente cuando nos encerramos en nosotros mismos con nuestras fantasías. La mayoría de las personas se aislan con sus fantasías de vez en cuando.
El aislamiento puede ser una decisión consciente del adulto que necesita un tiempo libre para estar consigo mismo, puede ser una imitación de la conducta de alguno de nuestros padres o puede ser por una actitud aprendida en la infancia para protegerse del sufrimiento o evitar un conflicto.
rituales
“¡Hola! ¡Buenos días! ¡Hasta luego! ¿Cómo estás?”
Los rituales son los intercambios de saludos entre personas dónde no se preguntan temas profundos ni de salud, y dónde se espera una respuesta "ritual" de la otra persona. El siguiente es un ejemplo de un ritual de dos personas que trabajan en la misma empresa, y se encuentran en el ascensor justo antes de entrar al trabajo:
A: ¿Hola, cómo estás?
B: Muy bien ¿y tu?
A: Lindo día ¿no?
B: Sí, precioso, espero se mantenga así.
A: ¡Ojalá! Buena jornada.
B: Gracias, igualmente para ti.
A: Hasta luego.
B: Hasta luego.
Si saludamos a alguien y el otro no nos correponde con el saludo, sentiremos que algo no está en su lugar, una sensación de menosprecio y enojo para con el otro ya que tenemos asumido que obtendremos una respuesta esperada.
Entre los rituales también se incluyen los utilizados por algunas culturas, grupos religiosos, ordenes secretas o partidos políticos y suelen ser mucho más largos y dedicarles una gran cantidad de tiempo. Algunos ejemplos son el ritual del té en Japón, la santa misa en la religión católica, etc.
pasatiempos
Los pasatiempos son aquellas transacciones en las cuales las personas pasan el tiempo hablando de temas irrelevantes. Discutir sobre temas de política, intercambiar sobre lo mal que va la economía o la educación, son ejemplos de pasatiempos. Estas formas de intercambio, son superficiales y seguras, y se utilizan entre personas que no se conocen muy a fondo.
Los rituales y los pasatiempos son formas corteses de pasar el tiempo sin complicarse en profundizar demasiado y otorgan a las personas la posibilidad de estudiarse psicológicamente antes de implicarse en una relación más profunda.
juegos
Los juegos a los que se refiere Berne son formas de interactuar que tenemos las personas, con una estructura determinada y que estructuran nuestro tiempo. Los juegos tienen un comienzo, donde hay una invitación a jugar al otro, un desarrollo y un final predecible.
Un juego es un conjunto recurrente de transacciones, a menudo repetitivas, con una motivación oculta; o, para decirlo más simple, una serie de movimientos para hacer caer al otro en una trampa. Se diferencian de los rituales y pasatiempos en dos cosas: tienen "segunda intención" y una "recompensa".
Los juegos son muy numerosos y con intenciones diversas y algunos pueden durar unos cuantos minutos y otros toda la vida.
ACTIVIDADES
Las actividades se consideran como trabajo y tienen que ver con la realidad exterior. Son formas de estructurar el tiempo que consisten en llevar algo a cabo.
Cuando las actividades se acaban, la persona siente un vacío interior o se siente inútil. En medio de las actividades, pueden surgir rituales y pasatiempos, juegos e incluso intimidad. Por ejemplo, en el trabajo en la oficina, alguien comenta sobre algún hecho que salió publicado en las noticias y todos se entregan a un pasatiempo común. También se puede recurrir al ritual de tomar un café luego de almorzar, retirarse a sus propias fantasías aislándose o iniciar un juego con otros compañeros, para luego volver a dedicarse a las actividades.
INTIMIDAD
La intimidad se da a un nivel más profundo de encuentro entre las personas, se comparten aspectos íntimos que despiertan sentimientos de ternura empatía y afecto. Es cuando se ve al otro tal cual es en su interior.
La intimidad puede darse en una mirada sorpresiva seguida de una sonrisa tímida, entre dos esposos que preparan una rica cena, o cuando acompañamos a un amigo que ha perdido a un ser querido. Sucede también cuando abrimos nuestro corazón a alguien que nos inspira confianza.
La intimidad asusta porque implica mostrarse vulnerable e implica el riesgo de quedar expuestos, por eso es más fácil jugar juegos psicológicos o perder el tiempo en actividades que exponerse a la intimidad y arriesgase a ser rechazado por eso.
Conociendo las formas de estructurar nuestro tiempo, podemos darnos cuenta a cuáles les dedicamos más tiempo y de esta forma podemos tomar consciencia de los cambios que necesitamos realizar para cambiar la forma en que utilizamos nuestro tiempo.
Por ejemplo podemos darnos cuenta que nos llenamos de actividades o jugamos juegos psicológicos para evitar conectar íntimamente con otros porque tememos la exposición o la vulnerabilidad.
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